MI INGENUIDAD REFLEJADA EN EL IRIS DE SUS OJOS LECTORES
Descubre un montoncito de brasas
y algo le dice que allí reside
el problema de la luz
aunque apagada, siempre
latente.
Se recoge el pelo
para disimular su nerviosismo
y las niega reiteradamente
(tratando de ocultarlas bajo la punta del zapato).
Descubre un montoncito de brasas
y algo le dice que allí reside
el problema de la luz
aunque apagada, siempre
latente.
Se recoge el pelo
para disimular su nerviosismo
y las niega reiteradamente
(tratando de ocultarlas bajo la punta del zapato).
Sandra Santana, Es el verbo tan frágil (Ed. Pre-textos, 2008)
Imagen: dibujo de Van Gogh
2 comentarios:
Hola
me encanto tu blog,
te invito a que conozcas cem%eu,espero que te guste
saludos llenos de confidencias
ts
Me hizo mucha ilusión ver el libro de Sandra y ver su alegría. Aún recuerdo cuando me lo entregó en manuscrito...me fascinó "Nuevas consideraciones acerca del destino del agua".
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