30.5.16

En lo oscuro se encuentran.

Dos altas torres solitarias.
Sin moverse, se miran el pecho.
Cada uno su propio pecho.

Él le da palabras.
Palabras de temor.
Palabras de abominación.
Palabras de soledad.
Palabras que atraviesan los nudos en la boca:
palabras de amor.

Y la torre de ella crece.
Blanca y sola.
Las palabras de él resbalan hacia el sueño.
Intactas.

Ella le da luz de luna.
Y a la luz de la luna, la torre de él se más y más pequeña.
Devuélveme el alma, dice él.
No conozco tu alma, responde ella.
Y cuando él le ruega
su torre se empequeñece.
Lo salva la mañana.
Alto, alto en el cielo la aguada voz de la trompeta.
Entonces huyen.
Van huyendo veloces cada uno hacia su lado del cielo.

En la llanura se encuentran todo el día
las palabras olvidadas.


Dane Zajc. Ceniza negra (Pen press, 2013). Trad. Florencia Ferre.

Imagen: Magritte. La página blanca.

15.5.16

SI HASTA EN EDÉN LAS COSAS HAN IDO MAL

Yo también entré por la salida de emergencia.
Yo también he sido un niño fuera de su madre.
Encontré encontré la araña donde construiré
el rincón de mi casa, ¡qué más da!
Y estoy loco de alegría por encontrarla.
Y estoy loco de tristeza, en general.

Posiblemente estando sentado en la cocina
mi labio grite por su cuenta algo inconcebible.
Me siento víctima de brujería, de soldadura obscena.
Hay un agujero en la escafandra, el batiscafo hace aguas.
He venido encerrado en un aullido que se aplaza
y así ando pensando en lo peor.

ΑΦΟΥ ΚΑΙ ΣΤΗΝ ΕΔΕΜ ΠΗΓΑΝ ΣΤΡΑΒΑ ΤΑ ΠΡΑΓΜΑΤΑ

Μπήκα κι εγώ από την έξοδο κινδύνου.
Ήμουν κι εγώ ένα παιδί έξω απ’τη μάνα του.
Βρήκα βρήκα την αράχνη όπου θα χρίσω
τη γωνιά του σπιτιού μου, δε βαριέσαι.
Κι είμαι τρελός από χαρά που τη βρήκα.
Κι είμαι τρελός από λύπη, γενικότερα.

Πιθανόν εκεί που κάθομαι στην κουζίνα
το χείλι μου να τσιρίξει μόνο του κάτι αδιανόητο.
Νιώθω θύμα μαγγανείας, θύμα αισχρής οξυγονοκόλλησης.
Τρύπησε το σκάφανδρο, μπάζει το βαθυσκάφος.
Ήρθα κλεισμένος σε κραυγή που αναβάλλεται
κι έτσι πηγαίνω τα χειρότερα σκεπτόμενος.


Kostas Vrachnos. Encima del subsuelo. Trad. Juan Vicente Piqueras y el autor.

Imagen: Yannis Tsarouchis, Otoño
Música: Vangelis, Autumn


6.5.16

GRECIA
Dondequiera que viajo Grecia me hiere
Yorgos Seferis
No conseguí explicártelo,
recuerdo su belleza como un borde de folio,
un corte limpio que no cicatriza:
así era el aire, un roce de ramas color tierra.
Todo lo evoco, porque
todo resuena, incluso
la intemperie que agota las columnas.
Así repito el símbolo de la primera mano
golpeando la piedra,
su lengua traducida
como pliegue de túnica.
Así, el paseo eterno
donde nunca nos vimos,
el hilo del relato
que nos debe un oráculo.
Si te miro a los ojos,
puedo tocar la tinta
de un libro sumergido.
Si me acerco a tu piel, puedo vivir de nuevo
el tiempo en las cariátides.
No quiero contestar esta llamada,
sé entenderte en el eco.


ΕΛΛΑΔΑ
‘Οπου και να ταξιδεψω, η Ελλάδα με πληγώνει
 ΓΙΩΡΓΟΣ ΣΕΦΕΡΗΣ
Δεν κατάφερα να στο εξηγήσω,
θυμάμαι την ομορφιά της σαν την άκρη ενός φύλλου χαρτιού,
ένα βαθύ κόψιμο που δεν γιατρεύεται:
έτσι ήταν ο αέρας, ένα άγγιγμα από κλαδιά γήινου χρώματος.
‘Ολα τα αναπολώ, γιατί ολα ηχούν ξανά,
ακόμα και το κενό που εξαντλεί τις κολώνες.
Έτσι, επαναλαμβάνω το σύμβολο του πρώτου χεριού
που χτύπαγε την πέτρα,
την γλώσσα της μεταφρασμένη
σαν πιέτα ενός χιτώνα.
‘Ετσι, ο αιώνιος περίπατος
που δεν βρεθήκαμε ποτέ,
το νήμα ενός διηγήματος
που μας χρωστάει ένα μαντείο.
Εάν σε κοιτάξω στα μάτια,
μπορώ να αγγίξω το μελάνι ενός βυθισμένου βιβλίου.
Εάν πλησιάσω το δέρμα σου, μπορώ να ξαναζήσω
το χρόνο με τις Καρυάτιδες.
Δεν θέλω να απαντήσω σε αυτό το τηλεφώνημα,
ξέρω να σε καταλαβαίνω στον απόηχο.


José Ángel García Caballero. Buhardilla (Valparaíso ediciones, 2014). Trad:Αδαμαντἰα Ζέρβα

Imagen: Templo de Atenea Afaya. Égina