Lo pasado, pasado, pero no
pasan nunca el asombro y la alegría
de entonces, cuando el tiempo
nos empezó a contar lo que seríamos.
Los cafés en la noche, con su luz
submarina, el andar de un lado a otro
inquietos, como en busca
de escenarios aún por estrenar;
y versos en lugar de las razones,
plazas de primavera,
todo un precipitado
amor que nada sabe
de los dones del mundo, salvo el fuego.
Carlos Pujol, Esta verdadera historia (Pre-textos)
pasan nunca el asombro y la alegría
de entonces, cuando el tiempo
nos empezó a contar lo que seríamos.
Los cafés en la noche, con su luz
submarina, el andar de un lado a otro
inquietos, como en busca
de escenarios aún por estrenar;
y versos en lugar de las razones,
plazas de primavera,
todo un precipitado
amor que nada sabe
de los dones del mundo, salvo el fuego.
Carlos Pujol, Esta verdadera historia (Pre-textos)
Imagen: vuelvo a poner, creo, esta terraza nocturna de van gogh y esta canción que repite tantas cosas:
3 comentarios:
Hermoso fragmento...
la imagen...qué puedo decir?...
adoro a Vincent!
un beso
Fantástico poema. Últimamente me estoy haciendo asiduo a Pujol.
Saludos
No conocía a este autor, pero el poema es muy hermoso. Y qué decir de ese cuadro..aún guardo en mí la memoria de los Van Gogh que vi hace pocos días...
Un beso
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