12.10.07

búsqueda


La parálisis volverá, lo sé –
la próxima vez será definitiva.
Este día con sol tembloroso a través del follaje
y el brillo punzante del lago
al pie de nuestra casa
es sólo una burlona pausa. El poeta que era yo
pronto va a ser una figura muda en un cuadro popular
bajo un cielo con agujeros de nudos,
aunque las ideas se apelotonan en la cabeza
y la garganta se tensa de deseo.
Tengo que encontrar el lenguaje parco, deprisa:
aquí sólo hay sitio para un puñado de palabras,
escritas con caligrafía carolingia
en una cinta
que sale de mi boca silenciada.



Kjell Espmark



vuelve Hopper y suena la señorita Watling:


1 comentario:

maría nefeli dijo...

EL poema sale de ese lugar donde todo se agolpa y no tiene forma y parece que va a desvanecerse...el poema sale de una boca silenciada queno recuerda el cuerpo del grito y la palabra...
un beso